Phil, la marmota, ha hablado y al salir de su madriguera y ver su sombra ha dicho que al invierno aún le quedan seis semanas más.
En la parte fría de Estados Unidos y Canadá se celebra un acto lúdico folclórico que atrae bastante turismo y que es conocido como el día de la Marmota, conforme al cual, para predecir el fin del invierno, se basan en el comportamiento de la marmota Phil cuando sale de hibernar el 2 de febrero de cada año, de manera que, si al salir de su madriguera Phil la marmota no ve su sombra por ser un día nublado, dejará la madriguera, lo cual significa que el invierno terminará pronto. Por el contrario, si Phil la marmota «ve su sombra» por ser un día soleado y se mete de nuevo en la madriguera, ello significa que el invierno durará seis semanas más.


El día de la Marmota, el 2 de febrero, señala (aproximadamente) la mitad del periodo entre el solsticio de invierno y el equinoccio de primavera y sirve de origen para una célebre y conocida película cuyo título más exacto sería el de «Atrapado en el tiempo» y que en España la conocemos como “El día de la marmota”, en cuyo argumento su actor principal Bill Murray, haciendo de meteorólogo, acompañado por su equipo de grabación, acude el 2 de febrero a la fiesta local de un pueblecito para comprobar el comportamiento ese invierno de la marmota Phil.
Murray representa a un hombre frustrado en sus ambiciones y aburrido con su trabajo, egoísta, grosero y arrogante que piensa que su carrera profesional no avanza todo lo rápido que merece.
Realizadas las tomas del evento, Murray y su pequeño equipo, al intentar regresar a la capital, se ven atrapados por una tormenta de nieve que cierra las carreteras y les obliga a pasar la noche en el pueblo, regresando a sus habitaciones del hotel. A la mañana siguiente suena el despertador y se pone en marcha la radio con el mismo programa del día anterior. Murray se viste y acude al desayuno cuando se va dando cuenta de que está viviendo de nuevo el día de la marmota, situación que se repite al día siguiente y al siguiente del siguiente, descubriendo Murray que es el único que se ha percatado del extraño fenómeno de estar atrapado en el mismo día, decidiendo entonces aprovechar la información para corregir errores al día siguiente cuando todo se vuelve a repetir iniciándose a partir de entonces una especie de camino de perfección en el sentido de que, cada día que pasaba, tomaba consciencia de sus errores del primer día e iba corrigiéndolos uno a uno salvo el intento de enamorar a su redactora jefe, que siempre le sale mal, por lo que Murray cansado de repetir cada día el mismo día, decide acabar con ello suicidándose y así salir de ese bucle temporal. Roba un coche y roba la marmota y se lanza a un acantilado en las afueras del pueblo, pero de nuevo se despierta por la mañana como cada día, entonces prueba otras formas de suicidarse (se arroja de un edificio, se mete en la bañera con un tostador eléctrico, etc.), pero todas ellas resultan inútiles y cada vez se despierta de nuevo el día 2 de febrero, en el mismo día de la marmota. Como esto no funciona se da cuenta de que puede mejorar su vida como un benefactor que ayuda a los demás y comienza así una vida diaria haciendo el bien a quien lo necesite, y al mismo tiempo día a día repetido va mejorando sus habilidades acabando siendo muy apreciado por la gente del pequeño pueblo. Por fin un día, rodeado por todos los habitantes del pueblo, confiesa su amor y ella lo acepta rompiéndose al despertar día siguiente, 3 de febrero, el misterioso bucle en el tiempo para ser feliz con su vida, convertido ahora en un hombre bondadoso y generoso, querido por todos.
Una película sencilla que con el paso del tiempo no ha envejecido quedando, gracias a ella, en el acervo popular, la conocida frase “el día de la marmota” para referirse a hechos que inexplicablemente parecen repetirse una y otra vez.